Carmina Burana

Hoy un post cortito para compensar el anterior, corrijo con posterioridad: va a ser que no. Puntos a tratar: Babelsberg, Lunes, Martes (fotocopiadora), Carmina Burana.

El domingo estuvimos en Babelsberg en un parque temático de televisión y cine. Ahí se podía disfrutar de un show de animales-actores (animales que son actores, no actores que hacen de animales), una explicación en directo de como se graban unas noticias, un stuntshow, un recorrido por una cuidad que solo tenía fachadas, por un muro de Berlín de cartón y ver la casa-caravana de Peter Lustig, presentador durante muchos de una serie para niños llamada Löwenzahn en la televisión alemana y que actualmente se encuentra en la ruina. Una historia muy triste en la que no quiero profundizar.

Lunes por la mañana disfruté con mis tíos y primos del Aquadrom Berlin: un montón de peces y animales marinos en distintos acuarios y unas chicas muy majas de las que aprendí un montón de cosas sobre los peces planos. Interesantísimo. Posteriormente tenía clase y fue taaaaan entretenido que tampoco quiero profundizar. Luego fuimos a cenar y ya desde la mañana tenía hambre de pez así que cené un pez (Zander) estupendo.

Martes, hoy, igual que el martes anterior, 10 horas de clase así que no entro en detalles. Lo más interesante que ha sucedido es que he imprimido unos apuntes en una impresora de la facultad que no esta en la misma habitación que yo, procederé en breves a una búsqueda exhaustiva y precisa de mis apuntes en la facultad de economía de la FU. Desearme suerte. (Van 4x4=12 céntimos en fotocopias)

Y la historia de Carmina Burana para terminar:

¡Vaya pieza! Una música magistral, un coro de lujo, una orquesta inigualable, y una escenificación solo comparable con un huevo podrido. Era innecesaria, distraía, en algunos puntos de mal gusto (el porno de los anos´50 que apareció temporalmente en una pantalla no quiero ni mencionarlo) y en resumen muy muy mala. Una mujer "bailando" o "escenificando" no se ni como describirlo pero parecía mas doloroso que artístico, un verdugo inflado con más esteroides que nuestra galaxia (chiste malo e incorrecto) y personajes secundarios que no se habían ni vestido para la ocasión.

El punto al que quería llegar es que la "artista" decide a lo largo de la obra irse quitando la ropa, a nadie le interesaba y no pintaba nada pero debía ser parte del guión. Os cuento el final directamente: se queda en tanga. Pero lo mejor, por lo que merecía pagar los 3 euros y muchos mas, era la señora que había a mi lado. Una mujer que rondaría los 80, divinamente vestida y preparada para la ocasión, decide, en el momento en el que la "artista" se quita el sujetador... (pausa suspense)...

...sacar unos prismáticos del bolso para ver exactamente lo que acababa de quedar descubierto al publico. ¡Unos prismáticos! Increíble. Sacó los prismáticos única y exclusivamente para verle los pechos a la "artista". Yo no he vivido una situación tan extraña en mucho tiempo.

¡Esto es todo!

De momento…